Aumenta el enoturismo
El enoturismo está ganando popularidad rápidamente en Europa, ya que satisface un nuevo deseo de experiencias de viaje culturales y multisensoriales. Según el primer Índice Europeo de Enoturismo de TUI, los viajeros de entre 18 y 44 años han mostrado el mayor interés. En particular, esta franja de edad ansía el descubrimiento cultural con aventuras gastronómicas.
Conclusiones del Índice Enoturístico Europeo
El índice, publicado por TUI Musement, analizaba las superficies de viñedo, los vinos DOP/IGP, los niveles de producción y el reconocimiento mundial.
En conjunto, Francia encabezó la clasificación, seguida de Italia y España. Mientras tanto, Grecia se hizo con el quinto puesto, marcando un salto significativo en la percepción global.
Además, Portugal, Alemania y Rumanía mostraron buenos resultados como destinos emergentes.
La fuerza de los viñedos italianos
Italia sigue dominando el enoturismo con su diversidad de regiones. Por ejemplo, la Toscana, el Piamonte y Apulia atraen constantemente cifras récord de visitantes. Tourism Review informó de que Italia produce alrededor del 97% de los vinos con DOP (Denominación de Origen Protegida) e IGP (Indicación Geográfica Protegida).
Esto refuerza su papel como destino vinícola de primera calidad. En consecuencia, las visitas a viñedos, las catas y el agroturismo se están expandiendo rápidamente.
«Los territorios enogastronómicos italianos se confirman como la columna vertebral del país, con el crecimiento de los pueblos rurales y de los destinos menores, como sedes de eventos, como propósito de viaje, el boca a boca en las redes sociales y las series de televisión en las que inspirarse, lo que representa un activo estratégico en el turismo mundial», señala Wine News.
El rápido ascenso de Grecia
Mientras tanto, Grecia está consolidando su lugar en el mapa mundial del enoturismo. En este sentido, Greek Reporter señaló que Grecia se situó entre los cinco principales destinos de Europa en 2025.
Las uvas autóctonas distintivas, como la Assyrtiko y la Liatiko, potencian su carácter único. Además, las ofertas volcánicas de Santorini están atrayendo la atención mundial por su sabor y autenticidad.
Los visitantes combinan las visitas a los viñedos con la riqueza cultural de Grecia. Los lugares antiguos, la cocina mediterránea y los paisajes costeros elevan la experiencia global. Como resultado, Grecia rivaliza ahora con los líderes tradicionales del enoturismo.
«La elaboración del vino en el Peloponeso (sur de Grecia) tiene una tradición milenaria ininterrumpida, lo que la convierte en uno de los centros históricos de la viticultura mediterránea», señala Marialena Tsimbidi, agrónoma-enóloga y directora de exportación de la Bodega Monemvasia, en declaraciones a National Geographic.
Motores del crecimiento turístico
Varios factores explican el auge del enoturismo. En primer lugar, los viajeros más jóvenes prefieren las experiencias inmersivas a las visitas turísticas al uso. En segundo lugar, la demanda de auténticos maridajes de comida y bebida está aumentando en todo el mundo. En tercer lugar, la mejora de las infraestructuras está haciendo más accesibles las regiones vinícolas.
Según TUI Musement, aporta miles de millones anuales a los mercados europeos de viajes. Por tanto, apoya las economías locales al tiempo que fomenta las prácticas sostenibles.
Desafíos futuros
A pesar del crecimiento, sigue habiendo retos. El cambio climático amenaza la estabilidad de los viñedos, y los destinos populares corren el riesgo de sufrir un turismo excesivo. En consecuencia, los responsables políticos hacen hincapié en la sostenibilidad del enoturismo. Mantener la autenticidad al tiempo que se amplían las experiencias será esencial. También es fundamental invertir en los pequeños viticultores y en las infraestructuras locales.
Perspectivas del enoturismo
El enoturismo está evolucionando de nicho a corriente principal. Italia lidera con su patrimonio y escala de producción, mientras que Grecia destaca con su autenticidad y sabores distintivos. Juntas, estas naciones muestran cómo esta bebida puede definir una experiencia de viaje. De cara al futuro, las prácticas sostenibles y las ofertas innovadoras darán forma al futuro del enoturismo europeo.