Tasa de denegación de visados Schengen
Mientras los viajeros africanos gastan millones en solicitudes de visados Schengen, acaban enfrentándose a tasas de rechazo sin precedentes.
En concreto, cada solicitud cuesta aproximadamente 90 euros y no es reembolsable, ni siquiera en caso de denegación. Como resultado, los africanos perdieron más de 60 millones de euros en tasas de solicitud denegadas. En conjunto, se trata de un golpe financiero para el continente, teniendo en cuenta sus niveles de renta.
En particular, el gasto no termina sólo con las tasas del visado. A ello hay que añadir el coste de la preparación de los documentos necesarios, la reserva de vuelos y la obtención de un seguro de viaje. Por tanto, los gastos adicionales hacen que la solicitud del visado Schengen sea aún más difícil de soportar, especialmente para las familias africanas. Las denegaciones de visado suponen un grave impacto económico para ellas.
Millones en tasas de visados Schengen
En África, Nigeria destaca con la mayor pérdida económica y la mayor tasa de rechazo de visados Schengen en 2024.
En concreto, según TechCabal, los nigerianos perdieron más de ₦8.000 millones -unos 5,1 millones de dólares- en solicitudes fallidas. Además, las autoridades rechazaron a casi la mitad (45,9%) de todos los solicitantes nigerianos. Esta cifra supone la tasa de rechazo más alta jamás registrada en el país.
Es importante señalar que muchos de estos solicitantes eran profesionales o estudiantes con motivos válidos para viajar. Sin embargo, seguían enfrentándose a denegaciones sistemáticas.
Disparidad en el rechazo de visados Schengen
Otros países africanos también sufren considerablemente a causa de estos rechazos. Por ejemplo, los solicitantes de Comoras y Guinea-Bissau se enfrentaron a tasas de rechazo del 63% y el 61%, respectivamente. En cambio, países como Islandia y Japón tuvieron tasas de rechazo inferiores al 5%.
Es evidente que existe una gran disparidad en función de la nacionalidad y la situación económica. Como tal, esto plantea dudas sobre la equidad en el proceso de obtención de visados Schengen. Aunque los consulados europeos afirman seguir procedimientos normalizados, los patrones de rechazo sugieren lo contrario.
Implicaciones más amplias de la denegación de visados
Los elevados índices de rechazo de visados Schengen no sólo cuestan dinero: cuestan oportunidades. Mientras los estudiantes pierden becas, los empresarios pierden negocios. Mientras, las familias deben permanecer separadas. En resumen, estas denegaciones rompen algo más que los planes de viaje.
Además, el coste psicológico es grave. Los solicitantes sufren a menudo vergüenza y humillación tras sufrir la denegación del visado, incluso para conferencias o estudios. Peor aún, las autoridades rara vez dan razones claras para el rechazo.
Pide reformas y equidad
Expertos y grupos de la sociedad civil piden ahora reformas urgentes.
En consecuencia, exigen transparencia en el proceso de decisión sobre los visados Schengen y una mayor responsabilidad. Algunos sugieren que las autoridades devuelvan las tasas de visado cuando rechacen solicitudes sin una justificación clara.
Además, la situación insta a los gobiernos africanos a comprometerse diplomáticamente. Además, deben abogar por un trato más justo de sus ciudadanos en las políticas de movilidad mundial.
En respuesta, algunos legisladores europeos ya han empezado a hacer preguntas difíciles. Aun así, una reforma significativa sigue siendo lejana por ahora.
Conclusión: Un coste demasiado alto
Las denegaciones de visados Schengen están vaciando los bolsillos de África al tiempo que excluyen a su población de las oportunidades globales. A pesar del evidente coste económico y emocional, poco ha cambiado en la política de visados. Mientras no se garantice la equidad, los viajeros africanos seguirán pagando un precio injusto.
Por tanto, las reformas no sólo son necesarias, sino que deberían haberse hecho hace tiempo.
Foto de Jaime Lopes en Unsplash